jueves, abril 05, 2018


Por  Freddy Ponce

CONSIDERACIONES MASÓNICAS AL LIBRE EXAMEN

El Libre examen, se puede establecer que constituye una expresión semántica del Librepensamiento o libre interpretación de diversos argumentos construidos por la sociedad respecto de leyes o hechos.

Así desde una visión argumental el librepensador es una persona que sostiene posiciones de búsqueda de la verdad, lo que ciertamente indaga en el encuentro con la lógica, con la razón y el empirismo en lugar de la aceptación de una autoridad, o tradición, revelación o ley dogmática establecida.

De manera que quienes participan del libre pensamiento son definidos como librepensadores, representando el análisis imparcial de hechos y decisiones, consideradas independientemente de toda imposición dogmática de cualquier institución, religión, tradición, tendencia política o cualquier movimiento activista que intente imponer un punto de vista ideológico o cosmovisión filosófica.

Por cierto el axioma tiene relación con el origen histórico del pensamiento revolucionario que dio origen a movimientos como el Renacimiento, el Humanismo, la Reforma, la Ilustración y la Revolución francesa. Desde donde surgen las ideas filosóficas desarrolladas para nuevas y diferentes formas de establecer el concepto de librepensador.

La Ilustración propone una actitud filosófica consistente en rechazar todo dogmatismo, religioso o de cualquier otra clase, y confiar en la razón para distinguir lo verdadero de lo falso en un clima de tolerancia y diálogo.

La aparición de la masonería en Gran Bretaña en el siglo XVIII, supuso un avance sustancial, en la libertad de conciencia pero no definitivo. En principio la masonería exigía a sus miembros la creencia en un Dios revelado, en una verdad superior, pero no especificaba cuál, por lo que, sin reconocer plenamente la libre conciencia, admitía la convivencia de dogmas basándose en el respeto mutuo y en la búsqueda de una verdad superior y unificadora, que quedaría plasmada en la figura del G.A.D.U. Sinceramente no es hasta la aparición de la masonería adogmática, que no se exige a sus integrantes la fe en ninguna verdad revelada, y que se reconoce la libre conciencia. Es el momento en que se prescinde de la figura de un ente superior, que dice cuál es la verdad, que la libre conciencia se convierte en el rechazo abierto a todo dogmatismo.

Para ingresar a la masonería, se exige ser un hombre libre, aunque a veces se ha relegado a las cuestiones pecuniarias, o sea ser libre para pagar las cuotas, lo que en parte a permitido marginar a la mitad de la humanidad, aduciendo para ello que las mujeres no podían ser recibidas masonas, porque no eran libres, para hacer frente a las capitaciones logiales.

El fin principal a que aspira la Masonería es la Confraternidad Universal, mediante el perfeccionamiento integral del Hombre. Para ello la Masonería simbólica sustenta un proyecto filosófico de mejora del Hombre. El masón se conoce a sí mismo e inicia un proceso de autoconstrucción para llegar a ser la mejor versión de sí mismo. La logia constituye de esta manera un espacio de búsqueda del saber, de la reflexión, del diálogo y de convivencia fraternal para el crecimiento personal.

El motor de la búsqueda es la duda filosófica la que representa la ignorancia, de modo que para salir de ella se necesita solo el conocimiento de sí mismo. La duda no es negación ni afirmación a priori, es sólo un estado de conciencia en el que no existen elementos para negar o afirmar algo. A partir de ella la Masonería ofrece un sencillo como antiguo método para el perfeccionamiento intelectual. Es un método que tiene como finalidad formar pensadores independientes deseosos de llegar por su propio esfuerzo al discernimiento de la verdad.

El método, usa ampliamente el símbolo y la alegoría, pero no ofrece de ellos ninguna explicación fija o dogmática, sino que deja en libertad al iniciado para que ejercite sus propias facultades deductivas e inductivas para descifrarlos y aprender -por sí mismo- las provechosas lecciones que encierran. De  modo que a través del simbolismo la masonería se consagra a la adquisición de habilidades en el uso de herramientas masónicas, que permiten una reflexión crítica, filosófica, humanista y meliorista, para alcanzar la plena posesión de las herramientas, y finalmente actuar eficazmente sobre él mismo y sobre la sociedad. Estimulando el libre examen, la expresión libre, la discusión ilustrada, el desarrollo de la imaginación y el pensamiento propio reflexivo y constructivo, como medio para conseguir que cada quien llegue a sus propias conclusiones.

El logro es un pensamiento filosófico de libre examen el que por definición, es crítico y constructivo que conduce a los adeptos al conocimiento e interpretación de los símbolos y mensajes rituales, propiciando la obtención de su significado real y profundo, y sólo así se adquiere una vivencia plena para quien los piensa y trabaja.


S.F.U.

Identidad y Masoneria


EN TORNO DE LA IDENTIDAD Y MASONERIA
 Por Freddy Ponce

Como parte de la comisión de docencia y en el ánimo de dar una versión diferente al trabajo presentado por el Q.H.M. Felipe Mera, me refiero a algunas consideraciones al tema de Identidad y Masonería y La Construcción de un Templo Inmaterial.

En una primera aproximación es necesario señalar lo difícil que es desconocer que uno de los mayores males que sufre la masonería, es el poco conocimiento que sus miembros poseen respecto de ella misma, sobre todo en relación a su naturaleza, historia y fines.

Al respecto es necesario precisar que la formación docente, ética y social de la orden, no justifica la generación de una identidad propia solo por la vitalidad y fuerza que da la tradición, sino que además resulta de particular importancia la generación de una identidad masónica al contar con un proyecto personal cuya identidad ética y moral sea recogida y aprehendida de esta institución.

Por cierto en una definida orientación e identidad masónica, los símbolos constituyen el gran y fundamental elemento docente, creador de una identidad característica, que constituidos en dos símbolos fundamentales como la escuadra (símbolo de la rectitud) y el compás (símbolo de los límites con los que debe mantenerse cualquier masón respecto a los demás) sean quizá los dos símbolos masónicos más conocidos.

Por otra parte como parte de la formación se dice que la francmasonería se define a sí misma como una institución discreta, de carácter iniciático, no religiosa, filantrópica, simbólica y filosófica y por cierto fundada en el sentimiento de fraternidad como hilo conductor de la formación. Ella tiene como objetivo la búsqueda de la verdad a través de la razón y fomentar el desarrollo intelectual y moral del ser humano, además del progreso social.

En consecuencia elementos como la Tolerancia, Inteligencia y Fraternidad, aportan al trabajo institucional, un desarrollo docente que significa estudiar, aportar y discutir, para que cada uno pueda ir perfeccionándose a pesar de las propias limitaciones de cada quien.
En acuerdo a ello la preparación recibida por los masones en sus templos destaca también aspectos de participación en temas de "Laicidad y Espacio Público", temas de importancia fundamental que destacan la importancia de "Preservar la Laicidad del Estado y el Espacio Público, manteniéndolo separado de las concepciones Filosóficas, Políticas o Religiosas".

Desde la visión de la Francmasonería el espacio público debe ser "el lugar donde conviven las personas y donde se construye ciudadanía". Por tanto, estos espacios "deben estar libres de cualquier monopolización e interferencia arbitraria o intereses particulares".

Por cierto No se trata de que la masonería sea un partido político, pero sí de que contribuya a potenciar y dar fuerza a la discusión de los temas públicos, donde uno de los ejes es lograr una mayor participación de la masonería en los asuntos públicos del país, para contribuir al mejoramiento social, fin último de la masonería.

Sin duda se puede entender que el espacio privado de la conciencia individual, debe permanecer en libertad y en el colectivo debe proporcionar las facilidades para desarrollar las actividades cualquiera sea la opción elegida libremente.

Asi en el perfil de un masón que se destaque por una identidad característica, se ha de considerar ser un hombre libre de dogmas, tanto en su participación en las instituciones públicas como en las privadas.

En definitiva el trabajo para el que se prepara la masonería, es identificar entre los ciudadanos aquellos problemas de índole social y publica, para contribuir en la discusión de los temas públicos con su opinión, que debe ser tolerante, balanceada y cuidadosa de los distintos puntos de vista. Y debe ser capaz de responder con aquello que espera el hombre y la mujer de Chile: hombres que de verdad contribuyan con inteligencia a mejorar las cosas.

De este modo el destino e identidad de la masonería es tratar de construir un mundo más feliz para el hombre y la mujer. La masonería no es solamente para masones, sino para el resto de la sociedad de modo de contribuir al mejoramiento social.

De esta manera la identidad construida por los masones como herederos de los formadores de la republica a lo largo de su historia, la sitúan como contribuyentes con sus miembros a erigir la institucionalidad republicana, dando vida a muchas iniciativas de bien aportando, en la medida de lo posible, a la construcción de una sociedad en que reine la fraternidad y la tolerancia.


S.F.U.



Ozono Atmosferico

OZONO ATMOSFÉRICO Lorenzo Chicón El ozono (del griego ὄζειν, tener olor) es la forma alotrópica del oxígeno constituida por moléculas triató...